Las normas se definen como acuerdos documentados con especificaciones técnicas y otros criterios, para asegurar que los materiales, productos, procesos y servicios sean apropiados a su fin.
La normalización en materia turística
      A-    A    A+



Certificaciones de Calidad

La normalización, también denominada estandarización, es el proceso de elaborar, aplicar y mejorar las normas que se usan en actividades científicas, industriales o económicas. Esto es con el objeto de ordenarlas y mejorarlas. La Sociedad Americana para Pruebas y Materiales (ASTM) define la estandarización como el proceso de formular y aplicar reglas, para una aproximación ordenada a una actividad específica, para el beneficio y con la cooperación de todos los involucrados.

Según la ISO (International Organization for Standarization), la normalización es la actividad que tiene por objeto establecer, ante problemas reales o potenciales, disposiciones destinadas a usos comunes y repetidos. Su fines obtener un nivel de ordenamiento óptimo en un contexto dado, que puede ser tecnológico, político o económico.

Persigue tres objetivos:

  • Simplificación: Reducir el número de modelos y de normas, para quedarse solo con los más necesarios.
  • Unificación: Se trata de permitir los intercambios y las comparaciones a nivel internacional.
  • Especificación: Se persigue evitar errores de identificación, creando un lenguaje claro y preciso.
La normalización o estandarización tienen como objeto elaborar una serie de especificaciones técnicas (normas), que son utilizadas de modo voluntario u obligatorio, según aplique el caso.

En Venezuela, FODENORCA (Fondo de Desarrollo para la Normalización, Calidad, Certificación y Metrología) es el Organismo Nacional de Normalización, según la Resolución Nº DM/075. Fue publicada el 10 de junio de 2009 en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela Nº 39.147.

En relación a este tema, existen otras organizaciones de carácter privado. Es el caso de FONDONORMA, asociación civil sin fines de lucro con personalidad jurídica y patrimonio propio. Fue creada en 1973 para desarrollar en el país las actividades de normalización y certificación en los sectores industriales y de servicios. Igualmente, para formar talento humano en dichas especialidades.




En el ámbito nacional, la calidad es regulada por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela (1999) en su artículo 117: “Todas las personas tendrán derecho a disponer de bienes y servicios de calidad, así como a una información adecuada y no engañosa sobre el contenido y características de los productos y servicios que consumen; a la libertad de elección y a un trato equitativo y digno. La ley establecerá los mecanismos necesarios para garantizar esos derechos, las normas de control de calidad y cantidad de bienes y servicios, los procedimientos de defensa del público consumidor, el resarcimiento de los daños ocasionados y las sanciones correspondientes por la violación de estos derechos”.

En este mismo contexto, la Ley del Sistema Venezolano para la Calidad, publicada el 7 de octubre de 2002 en la Gaceta Oficial N° 37.543, tiene por objeto:

  1. Desarrollar los principios orientadores que en materia de calidad consagra la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
  2. Determinar sus bases políticas.
  3. Diseñar el marco legal que regule el Sistema Nacional para la Calidad.
  4. Establecer los mecanismos necesarios que garanticen los derechos de las personas a disponer de bienes y servicios de calidad en el país, a través de los subsistemas de: Normalización, Metrología, Acreditación, Certificación, Reglamentaciones Técnicas y Ensayos.
En su artículo 34, este marco legal refiere que: “El Subsistema de Normalización tiene por objeto ejecutar las actividades de elaboración, aprobación, publicación y divulgación de las normas, con miras a facilitar el comercio, servir de base a las reglamentaciones técnicas, evaluación de la conformidad, comercio, el desarrollo industrial y proveer las bases para mejorar la calidad de los productos, procesos y servicios”.

Por otra parte, en su artículo 36 señala que: “Las actividades del Subsistema de Normalización se desarrollarán a través de la integración voluntaria de instituciones públicas y privadas, con la participación conjunta de productores, comerciantes, consumidores y usuarios”.

En definitiva, las normas son elaboradas por los organismos de normalización (en el caso de Venezuela, FODENORCA y FONDONORMA). Se hace a través de Comités Técnicos de Normalización (CTN).En los CNT que debe estar presente una representación equilibrada de las entidades interesadas en la normalización de un tema en concreto. Esto garantiza la transparencia, apertura y consenso en su trabajo.

El proceso de elaboración de una norma está sometido a una serie de fases. Ellas aseguran que el documento final es fruto del consenso. Cualquier persona, aunque no pertenezca al órgano de trabajo que la elabora, puede emitir sus opiniones o comentarios.


La normalización en materia turística

Es evidente la preocupación de las autoridades de turismo por establecer un marco de gestión para normar la actividad turística, bajo los principios promovidos por la sostenibilidad.

De acuerdo a la Organización Mundial del Turismo (OMT), desde 2010, el diseño de políticas y planes ha reflejado el trabajo desarrollado por las Autoridades Nacionales de Turismo -de la región de las Américas-. Esto ha sucedido junto a otras instituciones del Estado. Cada una ha contribuido a integrar la variable calidad en todos los ámbitos de la actividad.

Entre ellas están:

a) Instituciones del medio ambiente.
b) Parques nacionales.
c) Educación y cultura.
d) El sector académico.

Asimismo, las normas constituyen un instrumento de conocimiento público, consensuado, validado y aprobado por un organismo reconocido. Establecen un conjunto de criterios que son aceptados por el sector que pretenden “normar”.

Según la Organización Internacional para la Normalización (ISO, 1996), las normas se definen como: “acuerdos documentados que contienen especificaciones técnicas y otros criterios precisos para su uso consecuente como reglas, directrices o definiciones, con el objetivo de asegurar que los materiales, productos, procesos y servicios sean apropiados a su fin”.

Es por ello que, conforme a los requerimientos de la Organización Mundial de Comercio, las normativas son voluntarias. Solo pueden transformarse en un instrumento obligatorio cuando se incluyen en algún reglamento o ley. Esto tiene un efecto práctico determinante en la gestión del sector, por cuanto los servicios turísticos y el personal de contacto constituyen la principal razón del éxito o fracaso de un destino turístico en el mercado.



Consideremos que la calidad y sostenibilidad son factores determinantes para la decisión de un viaje.Aplicar normas e introducir procesos de mejora continua en toda la cadena productiva del turismo influirá de manera favorable. Específicamente, en la capacidad de las empresas para ofrecer mejores servicios y satisfacer las expectativas de los turistas.

Posicionarse en condiciones competitivas en el mercado turístico más exigente será un desafío alcanzable. ¿Cuándo? En la ocasión en que las autoridades, los empresarios y los actores involucrados establezcan estrategias conjuntas, que aseguren una relación calidad/precio acorde con ese objetivo. La imagen turística del destino será beneficiada.

Es en este contexto que surgen y se desarrollan normas y procesos de certificación en turismo. Estos estimulan a empresarios hoteleros; guías de turismo; empresas de transporte y agencias de viajes, entre otros, a invertir y capacitarse en “asegurar calidad”.

En definitiva, las normas actúan como un instrumento que refuerza la percepción que los turistas transmiten de cada sitio visitado. Por ende, deben tratarse como un factor estratégico para el posicionamiento de la marca turística del destino.

De allí surge la necesidad de contar con un marco regulador, de carácter obligatorio o voluntario -según corresponda-, que permita intervenir sobre distintos elementos de la cadena de valor, teniendo presente que es imposible abordarlos en su totalidad.

El propósito principal de las normas es definir requisitos y procedimientos que contribuyan a asegurar niveles de satisfacción “por sobre lo esperado” por el turista. Esta es una condición necesaria para insertarse en los segmentos más exigentes.


El Comité Internacional ISO TC 228

Turismo y servicios relacionados

Los comités técnicos de normalización están formados por todos los elementos de la cadena de valor del servicio turístico. Su fin es lograr la máxima representatividad y el consenso de los agentes implicados:



De acuerdo a su página web, el ISO/TC 228 es un comité creado en 2005 bajo un liderazgo compartido entre UNE (España) e INNORPI (Túnez). Hoy en día está integrado por 103 países y 23 organizaciones de enlace involucradas. En la actualidad cuenta con 29 normas publicadas y 12 proyectos en desarrollo en temas como:

  • Buceo.
  • Turismo de salud.
  • Turismo de aventura.
  • Puertos deportivos.
  • Alquiler de embarcaciones.
  • Turismo voluntario.
  • Sistema de gestión sostenible para alojamientos (turismo accesible).



El ISO/TC 228 es un comité técnico de la Organización Internacional para la Normalización (ISO). Desarrolla normas internacionalmente aceptadas de terminología y especificaciones de los beneficios ofrecidos por los proveedores de servicios turísticos. Incluye actividades relacionadas y destinos turísticos. También los requisitos de los equipos e instalaciones usadas por ellos. Todo esto es para brindarle a los compradores de turismo, proveedores y consumidores información valiosa con las que puedan tomar decisiones.




El referido comité técnico proporciona un foro para ocho grupos de trabajo dinámicos, los cuales cubren las siguientes áreas:

  • WG 1 - Servicios de buceo.
  • WG 2 - Servicios de turismo de salud.
  • WG 7 - Turismo de aventura.
  • WG 8 - Puertos deportivos.
  • WG 11 - Alquiler de embarcaciones.
  • WG 13 - Turismo sostenible.
  • WG 14 - Turismo accesible.
  • WG 15 - Alojamiento.
  • WG 16 - Restaurantes.

El comité ISO TC 228 ha ido creciendo en número de miembros progresivamente. En efecto, al día de hoy es uno de los comités más participativos de ISO. En 2018 sumó más de 100 países y cerca de 20 organizaciones de prestigio internacional. Todos, desde distintos enfoques y bajo la batuta española, perfilan las directrices comunes sobre la mejor forma de prestar un servicio turístico.

En el caso Venezuela, en mayo de 2019, el Organismo Nacional de Normalización (FODENORCA) conformó el Comité Técnico de Normalización CT51 Turismo. Está integrado por:

  • Entes y organismos públicos (MINTUR, VENETUR, INATUR).
  • Prestadores de servicios (CONSETURISMO, FENAHOVEN, ANAHOVEN, AVAVIT, AVECINTEL).
  • Grupos técnicos (universidades y centros de Investigación).
  • Organismos de evaluación de la conformidad (SENCAMER).
  • Consumidores, usuarios organizados y demás partes interesadas.



El objetivo del Comité Técnico es la elaboración, revisión, actualización y adecuación de normas y reglamentos técnicos de la actividad turística en el país.

Estas normas y reglamentos establecen requisitos mínimos que deben cumplir los prestadores de servicios turísticos respecto de su organización, servicios, infraestructura y competencias laborales de sus trabajadores. Su finalidad es brindar transparencia al mercado y otorgar una garantía de calidad del servicio a los clientes.

En este sentido, el CT51 Turismo ha previsto -como una de sus principales tareas- la revisión y actualización de la única norma técnica con la que cuenta el sector turismo en el país: la Norma Venezolana COVENIN 2030-87. Creada en 1987, consiste en la Clasificación de Empresas de Alojamiento Turístico.Desde entonces no ha sido actualizada.

Aportes de la Normalización a los retos actuales del Sector Turismo

Según el informe de la Asociación Española de Normalización (AENOR), “Apoyo de la normalización al sector turístico”, publicado en julio de 2019, las normas son instrumentos al servicio de la industria. Así lo han entendido los empresarios turísticos, quienes han colaborado con el resto de agentes implicados para construir, a través del consenso, las normas que serán el referente para la industria.

Dichas normas se han concebido como instrumentos de apoyo para abordar los principales retos del sector turístico:

  • Preservación de la sostenibilidad de los destinos turísticos, con base en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible a través de la colaboración pública-privada.
  • Diferenciación de la competencia, mediante una apuesta clara por la calidad de los servicios frente a otros destinos que ofrecen productos y servicios similares.
  • Diversificación de la oferta de sol y playa, reinventando destinos maduros. Apoyar el desarrollo de nuevos productos y servicios como el turismo de salud, el turismo gastronómico, el turismo cultural o el turismo náutico.
  • Aumento del gasto por turista, basado en una oferta competitiva, de calidad y en un servicio de profesionalizado.
  • Protección de la autenticidad, evitando la desnaturalización de los destinos, controlando la capacidad de carga de los espacios turísticos.
Entre los principales beneficios de la normalización a la actividad turística descritos en el informe, destacan los siguientes:

  • Adquirir conocimiento detallado de las normas. De esta forma, anticipar las necesidades y tendencias.
  • Influir en el contenido de las normas y garantizar que sus necesidades específicas se tomen en cuenta.
  • Establecer contacto con otros profesionales, expertos y reguladores, tanto en el ámbito nacional como en el internacional.
  • Contribuir a que las normas garanticen la seguridad, prestaciones, eficiencia e interoperabilidad que demandan los productos y servicios.
En el mismo orden de ideas, las normas proporcionan:

  1. Seguridad y fiabilidad. El cumplimiento de las normas ayuda a garantizar la seguridad, la fiabilidad y el cuidado del medio ambiente. Como resultado, los usuarios perciben los productos y servicios estandarizados como más fiables. Esto, a su vez, aumenta su confianza, contribuye al incremento de las ventas y a la asimilación de las nuevas tecnologías.
  2. Apoyo a las políticas públicas y a la legislación. Con frecuencia, el legislador hace referencia a las normas para garantizar el cumplimiento de la legislación, proteger los intereses de los usuarios y de los mercados y apoyar las políticas públicas. Las normas desempeñan un papel central en la política de un país para el mercado mundial.
  3. Interoperabilidad. La capacidad de los dispositivos para funcionar en conjunto se fundamenta en que los productos y servicios cumplan con las normas.
  4. Ventajas para la empresa. La normalización proporciona una base sólida para satisfacer las exigencias de los clientes, desarrollar nuevas tecnologías y mejorar las prácticas existentes. Específicamente las normas:
    • Facilitan el acceso al mercado.
    • Favorecen las economías de escala.
    • Fomentan la innovación.
    • Aumentan el conocimiento de iniciativas y avances técnicos.
      5. Garantías para el consumidor. Las normas constituyen la base para nuevas características y opciones, lo que contribuye a la mejora de nuestra vida cotidiana. La producción a gran escala basada en normas proporciona una mayor variedad de productos accesibles a los consumidores.
  
Finalmente, tal y como expone el Instituto de Normalización de Chile, “las normas técnicas sugieren para usos comunes y repetidos reglas, criterios o características para las actividades o sus resultados y procuran la obtención de un nivel óptimo de ordenamiento en un contexto determinado”. Así, las normas mejoran la calidad, la seguridad y la competitividad industrial, ya que especifican la calidad de un producto o servicio, al definir el conjunto de propiedades o características requeridas para cumplir su función de uso en forma satisfactoria.

Estas normas son voluntarias y se transforman en obligatorias cuando están consideradas “en una reglamentación dictada por la autoridad con carácter obligatorio, donde su incumplimiento implica sanción; especialmente cuando abarca aspectos relacionados con la salud y la seguridad de las personas, la información al consumidor y el medio ambiente”.







Fuentes consultadas:

https://committee.iso.org/sites/tc228/social-links/resources/espanol.html