El precio de la tonelada métrica del hierro, que fluctuaba los 90 y los 100 dólares, —en la primera semana de octubre—, un 50% menos que el récord de los 212 dólares que tocó en el verano de 2021, es uno de los productos básicos de peor desempeño este año.

Desde agosto, China Baowu Steel Group Corp., el mayor productor mundial, advirtió la crisis del sector ante la desaceleración y la crisis inmobiliaria del gigante asiático.

Las acciones de estas empresas han caído en el mercado entre un 11% y un 35% desde enero hasta principios de septiembre sin que sea significativo para las ganancias. “La combinación de un periodo de oferta robusta [como la de ahora] y una demanda en desaceleración pueden añadir presión adicional a la baja sobre los precios”, declaró a la prensa, Ole Hansen, responsable de estrategia en materias primas de Saxo Bank.

La previsión de empresas internacionales, como la minera brasileña Vale, han sido válidas en cuanto se tratará de un comportamiento para los próximos años, sobre todo cuando se siga vinculando con la baja de la construcción en China y a las medidas relacionadas con la reducción de la huella de carbono, que potencia la reutilización de otros materiales y chatarra.

Una situación parecida ocurrió entre 2015 y 2016, cuando los precios alcanzaron hasta los 50 dólares por tonelada.