El vino rosado o la alegría de vivir
Por: Con Clase
      A-    A    A+



Cada vez son más los wine lovers que dicen sí al rosé. He aquí las razones de su éxito, lo que debe saber de estos vinos y una representativa selección que se ofrece en el país.

Por Adriana Gibbs
 
Rosato en italiano, aunque algunos usan allí el término chiaretto para describir a un vino de un color rosado oscuro; en la región de Burdeos, en Francia, algunos rosé son llamados clairet. Como vino de verano, como vino para disfrutar frente al mar o en la piscina, como aperitivo, como copa para el brunch, como expresión de alegría de vivir… son solo algunos de los tantos momentos que se asocian con el rosé. Y es que el mundo está descorchando vinos rosados con entusiasmo.
 
Varias razones están detrás de esta creciente tendencia:

Este vino cambió para bien. “Antes se creía que el rosado era un vino de baja calidad, que era para gente poco o nada entendida en la materia; se hablaba del ‘rosadito’ como una bebida de muy poco valor enológico. Hoy en día, eso ha dado un giro de 180 grados: se están haciendo vinos de una calidad extraordinaria, las bodegas se dieron cuenta de que un vino rosado bien elaborado, vinificado de manera correcta, puede estar a la altura de los buenos blancos y tintos de siempre. En mesa los considero imprescindibles”, argumenta Mikel Aramburu, director de Iregua, firma que trae al país una representativa muestra de vinos rosados españoles.

Uno de los secretos del éxito es la incorporación de otras uvas para su elaboración. Hay vinos de excelentes cepas que tradicionalmente se utilizaban para vinos tintos. Es así como conseguimos grandes rosados de variedades como Tempranillo, Garnacha, Syrah, Malbec y Carménére, entre otras.
¿Otra razón? Las “narices femeninas”: rosados del Viejo y del Nuevo Mundo tienen ahora especial demanda, especialmente entre las mujeres. El maestro Alberto Soria lo describe muy bien en su libro Vino para uno: “son muchas y hace un siglo no se les tenía en cuenta. Su paladar, sus gustos y su forma de mirar y disfrutar del vino son diferentes. Las mujeres son la fuerza invisible que ha movido la transformación que vive hoy el vino”.

Mundo rosé

La fama del buen vino rosado nació -merecidamente- en el sur de Francia, en Côtes de Provence, importante región productora de rosado del mundo; más del 90% de la denominación se dedica a la producción de rosados.

A ella se suma la región de Tavel, en el sur del Ródano, también conocida por sus rosados de alta calidad. Allí se fundó el año pasado la Association Internationale des Rosés de Terroirs (AIRT) con la intención de promover y comercializar vinos rosados en el mundo.

En Italia también ha crecido esta tendencia: la región vinícola de Bardolino es muestra de ello, “el Chiaretto di Bardolino representa el 42% de la producción total”, destaca Raffaella Usai en Wein.plus. La aparición y éxito que ha tenido el prosecco Rosé es otro claro ejemplo. En el Piamonte, la Toscana o Sicilia, regiones clásicas de vinos tintos, se están elaborando rosados con las cepas Nebbiolo y Sangiovese, entre otras.

“Bebe rosa” ha sido el lema del Instituto Alemán del Vino (DWI) en 2022. La DWI reportó meses atrás que las ventas de estos vinos alemanes en el mundo habían aumentado significativamente. “Existe una clara tendencia hacia los rosados de mayor calidad, que no se consideran principalmente como un producto para calmar la sed, sino como un vino por derecho propio”, puntualiza Usai en Wein.plus.
 
Lo que un wine lover debe saber de los rosados
Su elaboración: el romance de una noche

Son varios los caminos para elaborar un rosé a partir de uvas rojas. Prensado directo: las uvas se aplastan suavemente hasta que el mosto adquiere el color deseado (en general, es sólo cuestión de unas horas). Algo de los componentes de los taninos y el sabor presentes en los hollejos se filtran también, lo que agrega una estructura extra y carácter al vino terminado. Estos rosados suelen ser de color claro.
 
Sangrado: el color se extrae mediante la fermentación y maceración de los hollejos con el mosto. Esto puede durar entre ocho y 48 horas. “Estos vinos son el resultado del romance de una noche, aunque a veces el romance no dura hasta el amanecer y otras veces se prolonga un poco más. Tras este romance se separan el hollejo del mosto, escurriéndolo de modo que el líquido precipite y se retengan los residuos sólidos”, explica el periodista especializado en vinos, Federico Oldenburg. Estos rosados tienen un color más intenso y cierto cuerpo. Los rosados de Navarra, España, se hacen con este método pues así lo establece la legislación de esta denominación de origen.
 
Sus estilos

Se clasifican en tres categorías:
 
Los delicados: su color suele ser rosa pálido. De estos son famosos los franceses (el bordeaux rosé, los elegantes pinot noir de Sancerre, los de Provenza), rosados del norte de Italia. Algunos son de gusto seco, mientras que otros poseen una pizca de dulzura.

Los vigorosos: tienen un color más profundo, son secos y afrutados, con algunos de ellos se puede comer. Elaborados con uvas robustas como Shiraz (en Australia), Tempranillo y Garnacha (los riojanos y los famosos los rosados de Navarra), Malbec (en Argentina) y Cabernet Sauvignon y Carménére (en Chile).

Rosados dulces: el rosé d´ Anjou y algunos rosados portugueses son dos ejemplos de este estilo.

En relación con su paleta de colores Ophélie Neiman, autora de El vino no tiene misterio, aclara esta falsa creencia: “Contrariamente al blanco o al tinto, el color de un rosado no indica algo en especial; depende del productor, algunos buscan tonalidades más oscuras, otros más pálidas (dependiendo, a veces, de las tendencias). Lo que da el color al mosto son los hollejos de la uva (mientras éstos se dejen más tiempo, se colorea más el mosto)”.

Al comprarlo…

Concebidos para ser bebidos mientras son jóvenes y frescos; “Son el tipo de vinos ‘cómprenlo hoy, bébalo hoy’. Deben ser frescos, frutados y vibrantes en cuanto a aroma y sabor. Cualquier otra diferencia sugiere que el vino está cansado, o que ya ha pasado su mejor momento. De hecho, cada vez que compra una botella de rosé, la añada debe ser su más importante consideración”, recomienda Neiman.

A la mesa

Los estilos más ligeros son ideales para el picnic y el brunch. Un rosé más oscuro, más robusto, para comidas más picantes. Los rosé franceses se prestan bien para ensaladas. Hacen buena pareja con atún, bacalao, calamar, pez espada, sardinas grilladas frescas, risotto de mariscos y langosta. Pero también se le puede beber con pollo asado con hierbas, carnes frías, cuscús de vegetales, entremeses, tarta de cebollas, costillas asadas y platos tex-mex, de la cocina india y asiática.
 
“La paella es un clásico; y en muchas zonas de Cataluña, acompañarlo con un vino rosado es un must. Prueba a hacerlo con un rosado y descubrirás nuevos matices”, invita Dehesa De Luna en el blog de su website dehesadeluna.com

Versatilidad

Los buenos rosados son polivalentes como bien lo presenta Bodegas Bianchi en su blog: “Un vino rosado es la copa perfecta cuando se tiene antojo de vino y en ese momento un tinto parece demasiado pesado y un blanco demasiado ligero. En un restaurante, si algunos comensales ordenan pescado y otros eligen platos con carne, será buena elección un vino rosado”.



20 vinos rosados para descorchar en Venezuela
Adobe Emiliana

Del valle chileno de Rapel. Color rosado pálido brillante. En nariz expresa intensos aromas frutales. Refrescante y fácil de beber.
Armentia y Madrazo
Riojano elaborado con Tempranillo, Viura y Garnacha. En boca es fresco, balsámico y muy afrutado, con una persistencia larga y agradable.
Aire de Protos
Cuatro uvas están en este vino de Ribera del Duero: Tempranillo, Garnacha, Verdejo y Albillo. Fresco y sedoso, su elegante acidez se equilibra con un complejo recuerdo frutal.
Be Bike
Viene de Navarra y da la oportunidad de probar un rosado hecho con Garnacha. Saluda de manera golosa: lo que dice en nariz lo refrenda en boca.
Clásico Rosé Ventisquero
Un 100% Cabernet Sauvignon. Expresa notas a frutos rojos silvestres de buena intensidad aromática, fresco, fácil de beber.
De Nit
Espumoso rosado catalán de la Bodega familiar Raventos i Blanc. Mineralidad y frescura de las cepas autóctonas Macabeo, Xarel-lo, Parellada y Monastrell.
Deutz Rosé
Este champagne destaca por su luminoso color rosado, muy vivo. Perlaje fino y persistente. En nariz y boca se desarrolla en una gama de aromas de bayas rojas con sutiles notas de panadería.
Estampa del Viento Rosé
100% Syrah y viene de un terruño especial dentro de Colchagua: Paredones. Botellas numeradas. Sus momentos: rosado para llevar a la mesa con cocina japonesa, india, mexicana.
Freixenet Rosé Brut
Cava de vivo color fresa. Afrutado con ricos aromas propios de la variedad Garnacha, notas de frutas rojas (mora, frambuesa), frutos exóticos (granada), bien armonizados.
Henkell
Espumoso alemán refrescante y afrutado. Color salmón con reflejos anaranjados. Perfume fresco de frutas rojas. Armonioso en el paladar.
I heart prosecco rose
Elaborado con glera y pinot noir, es fresco y floral con delicados sabores a frutos rojos y una viva efervescencia. Aperitivo, copa de tertulia y para disfrutar frente al mar.
Louis Perdrier Rosé
Espumoso afrutado y de frescura. De color rosado brillante y con burbujas vigorosas. En nariz tiene aromas de frutas rojas mezcladas con notas de cítricos. La boca se perfuma con esas mismas notas aromáticas y se observa un buen equilibrio final.
Mía Rosé
Delicado y floral, un refrescante rosado con notas de frambuesa y fresa tanto en nariz como en boca. Vino goloso (invita repetir) hecho con la uva Bobal.
M de Minuty
Rosado francés de Provence: la Garnacha se expresa en fruta roja (fresa), la Cinsault le da frescura, y la Syrah otorga carácter. Copa de seducción.
Moscato Rosé Mía Delicate & Sweet
Afrutado y chispeante, por su dulzura podría combinarse en contraste con quesos intensos o paté con un toque de confitura de fresas; y también puede acompañar postres: la clásica cheesecake.
Orube
Garnacha y Tempranillo (50% y 50%), este riojano es de color rosa pálido brillante. Sus aromas son delicados, sutiles, predominando los aromas florales y las notas cítricas. Por su frescura invita a seguir bebiendo.
Otazu Rosado Merlot
100% Merlot elaborado en Navarra. Color rosa frambuesa. Nariz dominada por una explosión de frutas rojas (grosella, frambuesa, fresas). En boca tiene volumen, tacto sedoso y final fresco.
Pomar Rosado
Hecho en Venezuela, este rosado regala aromas frescos de fruta roja confitada. En boca tiene equilibrada acidez, ligeramente abocado.
Tobelos
Rosa pálido, limpio y brillante. Seductor en nariz con notas de pétalos de rosa y frutos rojos silvestres. Entra en boca con frescura y muestra equilibrio hasta la despedida.
Trapiche Rosé
A la vista es de pálido color rosáceo con reflejos cobrizos. En nariz muestra aromas de fruta fresca. Muy gastronómico dada la fortaleza que le dan las uvas Malbec y Cabernet Sauvignon.