Esa forma de concebir el ser humano su existencia, vamos a verla desde la asamblea constituyente en tiempos de la revolución francesa.
Estado Ciudadano de Ideología (I)
      A-    A    A+


Por Carlota Salazar Calderón

¿Cómo se vería la ideología en un Estado que se apellide Ciudadano?. Para respondernos debemos ubicarnos en la coyuntura político - social, atendiendo el espíritu de los tiempos (Zeitgeist). Siempre es importante revisar el contexto local, nacional e internacional, para analizar ¿por qué ocurre determinado comportamiento en la sociedad?. Y digo esto porque la ideología ha sido un motor importante para los cambios sociales.
 
Esa forma de concebir el ser humano su existencia (ideología) vamos a verla desde la asamblea constituyente en tiempos de la revolución francesa, cuando los girondinos, conservadores, en apoyo a la monarquía se sentaban del lado derecho, personas influyentes, que defendían lo que tenían. Sus contrarios, los jacobinos, revolucionarios, se sentaban a la izquierda y querían cambios profundos. En el marco de unas mayorías empobrecidas, una burguesía que pretendía poder político, burlados por la monarquía, que los mandaba a ¡comer pasteles, si no había pan!

Desde ese tiempo la humanidad se ha quedado discutiendo sobre derecha e izquierda, sin ver que ha pasado mucha agua bajo el río. Que esos dos bloques que se establecieron en el marco de ese momento político, han sufrido a su vez, cambios importantes, por ejemplo: la dictadura con Napoleón Bonaparte; el retorno de la monarquía de la Casa Borbón; la segunda revolución industrial y el avance de un nuevo modelo económico en manos del mercado de producción capitalista; la explotación del hombre y el surgimiento del sindicalismo, gremialismo, luchas feministas, igualdad del voto; el comunismo, socialismo, sus versiones Rusia y China, que dejan una lección al mundo de hambre y miseria; la visión reformista del comunismo que es la socialdemocracia; el fin de la segunda guerra mundial con la democracia liberal, que terminó fortaleciendo los bloques de países de izquierda, comunistas vs. los capitalistas neoliberales, con la guerra fría.

Aún, hoy en día, en medio de la Guerra Rusia vs. Ucrania vemos cómo se han recrudecido estas posiciones fortaleciendo un mundo bipolar: derecha e izquierda; donde no hay espacio para los términos medios, las reformas, cambios progresivos… ni para los grises… y menos para quienes quieren una mixtura.
 
Extremos ideológicos que, a mí juicio, no atienden al Zeitgeist. En virtud de que con el siglo XXI llegaron tiempos de movilidad, conocimiento e información, nuevas ideologías: ecológicas, de género, progresistas en cuanto a derechos… que la dirigencia política no está atendiendo, para continuar abonando a un discurso confrontativo y excluyente, que divide las sociedades. Esta narrativa no está dando respuesta a los problemas reales de las grandes mayorías: desigualdad, pobreza, ineficiencia de los gobiernos, desconfianza la insatisfacción social que crece en Latinoamérica cada año.
 
El mundo sigue controlado por unas minorías que toman las decisiones, en función de sus intereses, por todos los demás. El discurso dominante, en términos de Touraine, es polarizante: ¿todo o nada? .¿Estás conmigo o eres mi enemigo?. Nos encontramos en la dicotomía confrontativa que no reconoce el valor del otro. Allí la importancia de un Estado cuyo norte sea el fortalecimiento de la sociedad, donde todas las ideologías tengan presencia. En la dialéctica, para oírse, discutir y buscar espacios de encuentro y consensos, por el bien común… siempre, siempre respetando el pensamiento del otro… análisis que continuaremos desarrollando en el próximo artículo.

@carlotasalazar
 

Ver más artículos de Carlota Salazar Calderón en