Su proyecto discográfico sabe a papelón con limón, a miel, a mango. Huele a romero fresco y a brisa marina, pero además recoge la picardía venezolana con un toque de nostalgia por la preservación de esas cosas simples y tan nuestras que nos enriquecen como pueblo. 

Andrea Paola Márquez rompe el celofán del escenario musical como solista con Cantos de Miel y Romero. Un disco que enaltece el empoderamiento

femenino, desatando un mundo de aromas, paisajes, sabores, que se entremezclan con nuestro humor característico. 

La cantautora es una creadora a tiempo completo que recopila en su trabajo la sonoridad de los pueblos latinoamericanos, con un formato atípico que incluye mandolina, bajo y percusión, con eventuales invitaciones al clarinete y a la guitarra.

Cuatro de los temas de su álbum debut son de su autoría. "Miel y Romero", un homenaje a sus abuelos; “Para ti” que es un canto al amor más genuino y puro; “El acto simple”, un poema de Vicente Gerbasi musicalizado exquisitamente por la artista, y “Mi atardecer” que cuenta la historia infantil propia del sol sumergiéndose en el mar al final del día, para luego salir seco al despuntar la mañana siguiente. 

El disco también guarda lugar a sus referentes musicales como la colombiana Marta Gómez, de quien interpreta “Ritualitos”; la venezolana Amaranta, de quien toma “Astromelia”, y la recopilación del maestro Vicente Emilio Sojo, “Cuando yo quiera casarme”, una muestra de la chispa del venezolano. Pero también incluye temas de la genialidad de Luis Mariano Rivera (“El mango”), Aldemaro Romero (“Sueño de una niña grande”) y Henry Martínez (“Marta, la lagarta”).

Cantos de Miel y Romero es una producción independiente de Andrea Paola, Jorge Torres y Kumaco Producciones que ya está disponible en plataformas digitales como Spotify, iTunes, Deezer, YouTube Music y Amazon. 

La infancia de la artista transcurrió en el estado Vargas (ahora La Guaira). Hija de una madre soltera, reconoce el valor de la femineidad en su disco, dado que viene de una familia donde las mujeres son ejemplo de lucha, estudio, progreso y constancia. "El trabajo es un guiño a la fuerza y delicadeza de la mujer. Sin duda la creación es un acto inherente al género femenino. Es la mujer vista como algo poderoso. Un ser humano con matices, con contrastes, capaz de impactar con sus actos al mundo".

El sencillo que le da nombre a su disco es un homenaje a quienes llama sus abuelos de la vida. Dos vecinos: Juan Romero, quien la llevaba a sus primeras clases de música, y Romelia, quien le daba a merendar pan con miel en las tardes.

Andrea Paola se define como "una docente que canta". Estudió Historia y es la creadora del proyecto "Mi Juguete es Canción”, con el que se enamoró de enseñar con reflexión, consciencia y transparencia. "Todo artista tiene una responsabilidad creativa pedagógica. Vivimos creando y tocando corazones a diario".

Es una estudiosa de los géneros latinoamericanos. En su haber tiene siete años de experiencia coral en el Orfeón Universitario de la UCV. Sus primeros pasos como solista los dio en la música tradicional, por lo que adora interpretar géneros como el merengue venezolano y la contradanza, pero su labor investigativa la hace conocedora de los tiempos y acordes de la samba y la chacarera argentina, el festejo peruano o el pasillo y el bambuco colombianos. "Latinoamérica es muy rica en su musicalidad", asegura.

Para ella la música es honestidad, por lo que no le quita el sueño ser súper famosa, más bien se ve como una embajadora del arte, a través de mensajes de paz con plena consciencia de que su papel es mantener vivas las tradiciones con arraigo cultural.

Asimismo reconoce que el acervo venezolano está regado por todo el mundo con la diáspora. "Somos músicos muy versátiles, capaces de interpretar casi cualquier género, lo que nos ha permitido colarnos con mucha facilidad y aceptación en distintos ambientes, lo que definitivamente ha hecho expandir nuestra música. En mi labor investigativa he podido constatar el notable papel en Latinoamérica de Henry Martínez y Aquiles Báez. Estamos empezando a convertirnos en un elemento irruptivo en el continente".

Andrea Paola Márquez es la creadora, junto a Jorge Torres, del proyecto musical “Mi Juguete es Canción”, que ella define como un espacio de construcción ciudadana y que surgió mientras daba clases de preescolar. Este 9 de noviembre se cumplieron 6 años de su primera presentación que ocurrió en Los Galpones, en Caracas, y que fue tan bien recibida por el público que quedó gente sin poder ingresar.

Lo que comenzó como una necesidad por cambiar la forma de hablar de los niños que asistían a sus clases, es ahora un proyecto multidisciplinario que incluye música, teatro, danza tradicional y los acostumbrados muñecos como elemento escenográfico y que representan a los artistas a quienes se hace referencia en el espectáculo. 

"Estamos trabajando en el segundo disco que ya casi está listo y es un homenaje a Aquiles Nazoa. El trabajo consta de textos del poeta que musicalizamos", acota. El primer larga duración del proyecto se llamó Para niños de 0 a 100 años y fue bautizado en 2017.

"Inicialmente, el proyecto estaba concebido para niños de 6 a 12 años, pero ha ido mutando y ahora también tengo de 14, por lo que estamos generando un espacio similar para adolescentes", señala.

Mi Juguete es Canción es tradición en diciembre, por lo que le preguntamos si a pesar de la pandemia se realizaría el show, y nos contestó que el acostumbrado noticiero musical "Noticias de una Navidad en Caracas", llegará al público en forma digital este 2020.