Revisando libros antiguos, práctica muy extendida en tiempos de confinamiento, descubrimos con agradable sorpresa el Recetario Internacional El Dorado, cuya única identificación dice que fue publicado con motivo del 30° aniversario de la C.A. Industrial Productora de Grasas y que fue preparado por “la Sra. Leonor Gordíls de Lázzari, experta profesora de cocina”.
El recetario data de 1965La curiosidad nos hizo preguntarnos qué era más interesante: copiar una receta o buscar el origen del libro. Lo primero fue más fácil y aquí dejamos una de torta de plátano, muy distinta de las que aparecen en Internet. Lo segundo nos tomó mucho más tiempo pues la empresa ya no existe.
La página con los datos de la empresaDespués de sortear incontables obstáculos, por fin Google mostró esta línea: “La C.A. Industrial Productora de Grasas fue fundada por un reducido…”, lo que finalmente nos condujo al libro La industrialización pionera en Venezuela: 1820-1936, de Gerardo Lucas (1998), donde se puede leer que la empresa “fue fundada por un reducido grupo de empresarios venezolanos en 1935 con un capital de Bs 200.000,00”. Es decir, el recetario data de 1965.
Y si bien la búsqueda del origen del libro fue ardua no lo fue menos la de su autora, de quien tampoco aparecen muchos datos, en especial porque parece que se casó dos veces pues sale con dos apellidos distintos. Sin embargo pudimos saber por otras fuentes que fue una “distinguida dama venezolana” dedicada a recopilar recetas propias y de sus amigas.
La publicidad de la épocaAhora hablemos del plátanoLa platanera tiene su origen en el sudeste asiático desde donde inició un largo camino hacia todas las regiones tropicales y subtropicales del mundo. Las primeras noticias sobre esta especie se remontan a los dibujos existentes en las antiguas ruinas del monumento javanés a Buda, levantado en Borobudur (Indonesia) en el año 850 a. C. Se conoció en el Mediterráneo desde el 650 d. C, llegó a Canarias en el siglo XV y fue llevada a América en 1516.
Esta fruta alegra el día a cualquier comensal pues contiene triptófano, un aminoácido que el cuerpo convierte en serotonina, la hormona que produce buen humor y felicidad. Además de su versatilidad –pues se puede comer frito, horneado, sancochado, verde, pintón o muy maduro– su sabor nunca decepciona.
La receta original
Ingredientes 
