Desde la calle hasta el parto
Lo primero que te invade es un gran miedo que debes tratar de controlar. Luego ves pasar el tiempo y comienzas a preocuparte porque siguen las restricciones sanitarias y puede llegar tu fecha de parto en la misma situación.
Un aspecto que debemos manejar es diferenciar lo que se esperaba y lo que se podrá hacer si continúan las restricciones sanitarias. Por ejemplo, yo soñaba con una clínica llena de amigos y familiares para recibir juntos a mi bebé y eso ya no luce viable en el panorama actual.
Por ello es clave reestructurar tus planes mentales. Después de todo, lo más importante es que estás cerca de tu sueño de manera segura.
Al paso de algunos meses entendí que es importante soltar el miedo y comenzar a vivir el momento, aunque no sea tan perfecto como lo había pensado. Soltar el temor es clave para tener la mente en paz, en tranquilidad. Ello, dicen los expertos, ayuda a mantener las defensas altas.
Si ya estás embarazada ocupa tu mente, pinta, medita, lee, eso te ayudará a estar tranquila. Y si estás en algún plan de fertilidad no tengas miedo ni pienses que seguir con esos planes es una locura, pues realmente no sabemos cuánto tiempo tengamos que convivir con este virus y lo que toca es aprender a avanzar pese a él, y aprender a cuidarnos.
Quizás sientas que estás sola, pero no es así. A través de mis redes
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