Se define como una mujer comprometida en lo que decide hacer, cariñosa, honesta, respetuosa, de pocas palabras, pero muy directa y de buen sentido del humor. Realizó estudios de administración de empresas en la Universidad de Carabobo y una especialización en marketing internacional en Boston.
Su familia es muy unida y presente en cualquier circunstancia: “Tengo la fortuna de tener padres ejemplares, que a pesar de estar divorciados y vueltos a casar, nos han enseñado la importancia de que la familia debe permanecer unida ante cualquier adversidad. Mi hija mayor ha sido de gran apoyo en la casa y ahora en el trabajo, mis hijos menores son la gasolina de estos padres algo mayores, que lo de mayores no lo digo por mí, sino por Luis (Chataing), mi esposo, compañero de vida, quien es muy activo y participativo en el desarrollo de nuestros hijos”.

 
Los días de Xinema comienzan a las 4:40 am y lo primero que hace es buscar un espacio para hacer ejercicio. Cuando regresa a casa, ayuda a su esposo en la preparación de los niños para el colegio y luego comienza su jornada laboral, que incluye reuniones, bookings, logística, giras y campañas. “Mi trabajo es de lunes a lunes, con interrupciones para dedicarle a los niños. Los fines de semana, si no estoy trabajando en un show, busco la energía para hacer actividades con la familia y poner en orden la casa; por eso no me pregunten sobre series de Netflix, me las he perdido casi todas”.
El tenis es el gran pasatiempo de Ximena: “Me ha permitido adaptarme y conectarme con gente en las diferentes ciudades a las que me ha tocado migrar. Son mis días sagrados de la semana. Lo elegí porque es un deporte competitivo, social y lo puedes disfrutar para el resto de tu vida”.
Un aprendizaje que Ximena tiene de la vida es que, definitivamente, “la vida es HOY, mañana no sabemos. Esto me motiva a enfocarme en un día a la vez, aprovecharlo al máximo, a ser flexible y salirme de mi programación si es necesario”.

Por eso, cuando en el 2020 todo cambió, ella se amoldó y obtuvo muchas cosas: “En la pandemia logré poner al día mi casa, leer un par de libros y estudiar un poco el tema digital. Luego de tantos shows cancelados y cancelar un congreso de mi hermana de odontología, vimos la oportunidad de intentar hacer cosas online. Al inicio, los comediantes estaban negados a hacer show de comedia por zoom. Luego, al entender que la pandemia iba para largo, Led Varela se abrió a la posibilidad y adaptamos su show de stand up Felicidad al streaming y fue todo un éxito, logrando conectar a más de siete mil personas por el mundo”, cuenta.
En la actualidad, está desarrollando distintos proyectos, de los que comenta: “Estoy manejando las giras por el mundo de Led Varela, Luis Chataing y Manuel Ángel Redondo. En Estados Unidos estoy produciendo la gira de Nanutria y próximamente se sumarán nuevos comediantes que están en proceso”.
El logro más importante que ha obtenido a lo largo de su carrera es “luego de la pandemia, lograr realizar 178 funciones en ocho meses. Eso me hizo sentirme muy orgullosa”. Para este año, también quiere abrirse a nuevos públicos haciendo producciones de comediantes de otras nacionalidades.
En cuanto a sus metas por cumplir, Ximena nos dice: “Sueño con seguir ampliando el circuito de comedia que actualmente manejo y un par de proyectos que estoy trabajando. También sueño con ser ejemplo para mis hijos, para que sean grandes seres humanos y profesionales como sus padres”. Asimismo, quisiera convertirse en la productora hispana de referencia para comediantes dentro y fuera de Los Estados Unidos.

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