En 1985, un modisto y un diseñador gráfico decidieron revolucionar el mundo de la moda con la fundación de una nueva marca, misma que unos años después sería sinónimo de extravagancia, escándalos y glamour.
Dolce & Gabbana es una de las firmas de moda más reconocidas de Italia, pues sus directores creativos se han encargado, a lo largo de las últimas décadas, de expresar muy bien sus ideas y sus conceptos de modo que no fueran ni cercanamente parecidos al trabajo de los demás. Una fórmula en la que se puede apreciar una majestuosa y divertida combinación entre una chispa de locura y genialidad.

Sus primeros pasos
Para 1980, el siciliano Domenico Dolce y el milanés Stefano Gabbana decidieron unir sus mentes para hacer realidad una firma que daba su gran aporte a ese renacimiento de la moda italiana y que en poco tiempo escaló al punto de ser usada por grandes íconos.
Ambos creativos sostuvieron una relación sentimental que dio vida a este gran proyecto, y aunque muchos pensaron que su fin llegaría en 2005, cuando hubo una ruptura amorosa, la verdad es que ambos supieron canalizar sus emociones y seguir llevando a cabo esta marca que, cada día, se hacía más relevante. Es así como, tras más de 20 años de trabajo, Dolce & Gabbana se reconoce como una de las pasarelas más esperadas.
Ninguno de los dos tuvo una infancia fácil. Stefano, a los seis años, limpiaba baños para ayudar a su madre que trabajaba como limpiadora doméstica en Milán. Pasados los años, logró estudiar artes gráficas en Monza, pero muy pronto descubrió que su verdadera pasión era la moda. Por su parte, Domenico ha comentado que su madre era muy estricta y que lo obligaba desde muy pequeño a trabajar en la sastrería de la familia en un pueblo de Sicilia. Luego estudió diseño de moda en el Instituto Marangoni de Milán, reconocido como el mejor y más antiguo de Europa.
El encuentro entre estos dos creativos ocurrió a mediados de los 70, cuando coincidieron en una empresa de un diseñador textil. Ahí, ambos descubrieron que tenían una gran afinidad, no sólo en personalidad y formas de ver la vida, sino en lo más importante: como sentían la moda. Así fue como, tras algunos años en diferentes empresas, decidieron fundar una propia a inicios de los 80. Un negocio que rápidamente creció convirtiéndose en una de las marcas más representativas de la moda italiana.