Nació en una pequeña localidad de Luisiana (Estados Unidos) y su familia estaba llena de músicos muy reconocidos en la zona. De hecho, para el álbum con el que ganó el Grammy, We Are, Jon le pidió a su abuelo, sus sobrinos pequeños y sus amigos de la infancia que colaboraran con él.
Siempre fue un niño muy tímido, pero sus profesores han confesado que tenía una capacidad admirable para aprender y que siempre estaba ávido de nuevos conocimientos.

 
Siendo un adolescente, fue a un campamento de música de verano y allí conoció al amor de su vida, Suleika Jaouad, quien lamentablemente durante la pandemia fue diagnosticada por segunda vez con leucemia; sin embargo, él ha afrontado la situación como mejor sabe hacerlo: con música, fe (fue criado como católico) y esperanza.

 
Y es que para Batiste, tocar música es “una práctica espiritual” y su manera de “meditar y conectar con el mundo” que le rodea. No obstante, también es su profesión. Además de su carrera en solitario, también toca con su banda, Stay Human, que desde el 2015 pone la música en directo a uno de los programas más populares de Estados Unidos: The Late Show with Stephen Colbert.
No sólo por su música, también es un deleite escuchar sus canciones por sus letras, pues están llenas de mensajes positivos e inspiradores: “Cuando escuchas el tema que da título al disco, oyes a mi abuelo hablar y dice en un fragmento: ‘Nadie puede darte la paz interior. Tienes que encontrarla. Y tienes que cultivarla cada día’. Y la parte divertida es cuando ves que se desarrolla en la vida de una persona y se convierte en alguien que cambia el mundo, como Maya Angelou o Martin Luther King Jr. Estas personas han influido en nosotros. Ese es el nosotros del que hablo. Estamos aquí ahora. Así que ya sabes, puedes cambiar el mundo tú mismo”, dice Batiste sobre su tema We Are (Somos).