La marca Spranger nació en el 2003 y se formalizó como empresa en el 2004. Su creadora es Yenniffer Spranger y cuenta: “Tras un período de vacaciones, me dejé llevar por la creatividad y la pasión por la moda y me lancé a crear mis primeros diseños, comercializándolos principalmente entre mi familia y amistades. Ante la buena receptividad del producto, poco a poco lo que había empezado como un hobby empezó a surgir como un emprendimiento, hasta llegar a una marca que tiene presencia en el mercado nacional e internacional”.

Estilo distintivo
Los diseños de Spranger están inspirados en la naturaleza, la feminidad y la delicadeza de cada mujer que se identifica con los diseños de la firma. Los materiales que utiliza Yenniffer son escogidos y curados por ella misma, junto a su equipo, y así se aseguran de ofrecer la mejor calidad: “Toda nuestra materia prima es importada desde Barcelona (España) y Colombia. Nuestros diseños de estampados son propios y creados en exclusividad, los cuales son adaptados según el material donde se vayan a plasmar. Nuestra marca es una conjunción de piezas fabricadas nacionalmente y materia prima importada. En Spranger nos encanta estar encima de todo aquello que tiene que ver con el proceso de creación de nuestras piezas, produciendo en nuestro taller, ubicado en la ciudad de Puerto Cabello”, dice la diseñadora.
En Spranger, se puede decir que trabajan por cápsulas y cada una tiene una tendencia, inspiración y mucha dedicación: “Cada una de ellas cuenta una historia y tiene un hilo conductor que es la esencia de todas las cápsulas. Trabajamos creando un significado, una idea, un concepto… no comercializamos meramente un producto. Nuestro ADN fusiona un porcentaje de tendencias aplicado a nuestras propuestas. Además de contar con piezas de colección, encontrarás propuestas en los básicos de la marca que representa el color negro, blanco y color rojo”, asegura.