La manufactura del bolso es italiana, confiesa su creadora, que esa es parte de la magia de la marca. “Si bien mis bolsos son elaborados en Italia, su esencia es venezolana. Parte de nuestra visión es elevar al artesano venezolano combinando la mano del talento italiano y con pinceladas de lo nuestro. Para uno de mis primeros modelos, decidí empezar con un grupo de artistas venezolanos de la Isla de Margarita, que con sus textiles adornan las carteras, es el modelo Fantasía. Nuestra identidad siempre clara a donde sea que vayamos.

Lujo colorido
Es un producto con el máximo estándar de calidad, con diversos tonos para todos los gustos, ocasiones y estilos, eso sí, prevalece la elegancia y un diseño inigualable que atrapa las miradas. “Tengo colores más clásicos como el rojo, el azul, negro, pero también un rojo frambuesa y un verde limón. Los gustos son infinitos y no todos los modelos van con todos los colores, es cuestión de estilo. Mi frase icónica: ‘La mujer no tiene edad, sólo etapas en su vida’, así que hay momentos para todo”, comparte la creativa. Rhonda y Fantasía son dos de los diseños más queridos y, que muy pronto, espera que estén presentes en otras ciudades como Miami.



Una imagen con significado
La firma utiliza en su logo una flor de loto, que se transforma en una rosa, que para Raquel tiene un sentido de perseverancia, lucha y logros.
“La flor de loto nace de las aguas estancadas donde la naturaleza hace magia y emerge una nueva forma de vida. La semejanza a lo que vivimos en Venezuela ese año, en el que yo salí a prepararme en otro país, dejando atrás a mi familia en medio de un caos nacional. Eso fue lo que hice: emerger cual flor de loto, creando una rosa de ella, elegante como una dama, mi marca”, puntualiza Raquel.

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 “Quería conseguir un material elegante, duradero y comprometido con el ambiente”, asegura Raquel. En su búsqueda, encontró la Unión de Curtidurías Italiana, cuyo movimiento busca la excelencia del cuero, utilizando pieles de deshecho y no de matanza del animal

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Raquel y su ADN
La arquitectura fue elemental en su vida, estudió esta carrera y para ella es prioridad buscar el balance entre lo hermoso, elegante y lo funcional. Siempre le han apasionado los bolsos, sin importar el nombre de la firma o marca, aprecia totalmente el diseño. Al estar en Italia, tuvo propuestas para hacer moda, fue sólo un año después que realizó un curso intensivo de Bag Construction and Design en Milano, Italia.
Antes de enfocarse en su firma, Raquel dedicó los primeros años de su carrera al diseño de mobiliario, más adelante se concentró, por muchos años, en el diseño de interiores, en viviendas, tiendas, oficinas y más. “La industria de la moda es enorme y admirable, hay mucho y tanto que aprender día a día. Mi mayor apoyo ha sido, y es, mi esposo. Desde el primer día, él siempre supo que mi sueño era estudiar diseño en Italia, así que contribuyó mucho a lograrlo”, los detalles le fascinan. La moda siempre ha sido su pasión, le tiene respeto, y siempre busca prepararse para brindar excelencia.
“Al diseñar pienso en mujeres que han hecho impacto en mi vida: mi mamá, mis hijas, mis compañeras de estudio o trabajo, mujeres periodistas, en fin, mujeres que admiro. Todas ellas están reflejadas en mis diseños. Raquel Porte es una firma atrevida como Venezuela, elegante como Italia, y decidida como toda mujer. Vivimos en tiempos en que la moda es una herramienta fundamental para educar y transmitir, para sentirnos mejor con nosotras mismas y para expresar nuestro carácter único”, finaliza la creativa.

Instagram: @raquelporte_bags