Luciendo su belleza y simpatía desde muy joven, Jessica tiene una trayectoria extraordinaria en los concursos de belleza. Se coronó como Miss Tierra Venezuela en el 2009 y representó a Venezuela en Filipinas, donde quedó de segunda finalista. Dos años después, se corona como Miss Venezuela International y, tras una larga competencia en China, se trajo el título de primera finalista a casa.

 
Su carrera como modelo despegó rápidamente conquistando grandes firmas. Se estableció entre Miami y Nueva York, pero quería buscar nuevos horizontes: “A mí me faltaba una excusa para buscar hacer algo diferente, pero cuando te va bien y estás cómoda en lo que estás haciendo, es difícil salir y comenzar desde cero”, nos dice.

 
La oportunidad para reinventarse llegó tras el compromiso con su actual esposo, Federico Pauls: “En el noviazgo nos visitábamos mutuamente, pero cuando llegó el compromiso, teníamos que tomar una decisión. Fui yo la que decidió empezar de cero. Fue por amor, yo quería hacer mi familia y no me arrepiento de nada”. Así nació su primer proyecto, su blog Peace & Vogue, en Panamá (país donde trabaja Federico, de nacionalidad argentina).

¡Miren lo que estoy haciendo!
Para el 2013, el mundo de las redes sociales estaba comenzando. El término influencer todavía no existía, pero Jessica encontró una oportunidad de compartir lo que hacía a través de su Instagram y su blog: “Todo comenzó muy orgánico. Yo no conocía a nadie y estaba descubriendo Panamá. Compartía mi día a día, mis outfits, dónde comía, qué conocía y era más como decir: ¡Miren lo que estoy haciendo! Fue creciendo el proyecto, lo fui estructurando y se convirtió en mi trabajo”, explica Jessica, que ya tiene más de un millón de seguidores en Instagram.
Desde el inicio, se tomó muy en serio su presencia en Internet. Para ella, mantener su autenticidad y desarrollar una credibilidad era muy importante: “Hubo mucha gente que se sorprendió al saber que con redes podía monetizar, pero se olvidó que el objetivo principal de una red social pública es crear una comunidad”.
Apasionada por cómo se desarrollaba su proyecto, abrió su propio canal de YouTube y se convirtió en un éxito total: tutoriales de belleza, reglas de oro para el éxito y vlogs de su día a día. Logró reunir 538.000 subscriptores y tiene videos con más de cuatro millones de vistas.

¿Una vida perfecta?
Entre atuendos de ensueño, viajes paradisíacos y una personalidad muy optimista, Jessica es una influencer ícono del lifestyle, pero siempre se mantiene auténtica y real: “Yo me muestro cara lavada, que voy llegando tarde, que estoy estresada… ¡cero perfecciones! Hay días en los que me siento regia y otros días estoy complicada, pero así es la vida. Uno tiene que ser uno mismo”.
Su comunidad se mantiene fiel a sus contenidos y cuando llegan críticas o comentarios negativos, Jessica los aleja de forma consciente: “Aprendí a ver que su manifestación de frustración viene de algo que esa persona está viviendo y no tiene nada que ver conmigo (…) Soy una persona muy positiva, muy optimista. Yo siempre creo que lo mejor va a pasar, lo malo no es una opción”. Y esta energía la alimenta con la comunidad que ha logrado en redes: “Yo busco conectar más con la seguidora fiel, que con el hater”, asegura.

Jess Modo Mamá
Con una carrera que crece como la espuma y un matrimonio feliz, llegó el momento para que Jessica creara su propia familia: “Panamá me parecía un súper lugar para hacer familia. Es pequeño y tiene esa idiosincrasia latinoamericana que me encanta para criar una familia”.
Su primer hijo llegó en el 2016, Benjamín, y se convirtió en su mejor amigo. Esta nueva etapa como mamá la hizo sentirse invencible: “Ser mamá te pone la vida en perspectiva. Las mujeres somos súper poderosas, no hay nada que no puedas lograr si te lo propones”, comenta.
Y en el 2019 aparecieron dos mellizas que le pusieron el mundo al revés de la mejor manera posible: Olivia y Chloé. “Ser mamá de tres es un caos maravilloso. El ritmo de vida se vuelve mucho más complicado. Las prioridades en tu vida se reorganizan y te das cuenta de que eres capaz de mucho más de lo que en un principio te dabas crédito”.

De personalidades completamente diferentes, Jessica disfruta a sus tres pequeños todos los días: “Benja es muy tranquilo, protector y noble. Las mellas son unos terremoticos… ¡Son candela! como diríamos en Venezuela”, comenta entre risas.
Todas sus andanzas con sus tres hijos las comparte en una cuenta sin filtros y llena de realidad que se llama @JessModoMama
“La maternidad tiene miles de desafíos y yo no quiero romantizar nada, pero hay algo que yo me grabé, es mi mantra: Las noches son largas pero los años son muy cortos. Tenemos que estar ahí siempre para ellos”.

Familia que se mantiene unida
Su familia está regada por el mundo, pero cuando se reúnen, es un pase libre para la conexión entre los niños: “Cuando están todos juntos, la respuesta para todo siempre es sí. Todos vivimos en diferentes países y cuando tenemos la oportunidad de reunirnos es el momento más preciado”, comenta.
Con las tres niñas de su hermana Sascha (@SaschaFitness) y los tres de ella, las reuniones familiares son dignas de una película: “Siempre es un caos. Hay gritos, ruido, travesuras… la casa es un desastre, pero ellos se divierten y juegan. Esa es la alegría de uno: verlos juntos”, asegura.
En esta familia de famosas, en el buen sentido de la palabra (porque hasta su mamá Peggy tiene su cuenta @PeggysFood), todas son un equipo inquebrantable y se apoyan incondicionalmente en todos sus proyectos, aunque en redes siempre busquen enemistarlas: “A mí eso me parece comiquísimo y súper absurdo. Uno no envidia a su hermano; uno se alegra, lo impulsa, lo aplaude y desea que le vaya buenísimo. Yo soy su fan número uno. Cuando la gente vive buscando eso, es porque el venezolano está muy acostumbrado a las novelas”, se ríe.

De blogger a empresaria
Utilizando su plataforma como blogger, decidió incursionar en el mundo de la moda con una cápsula de vestidos luxury que llamó Jessica Barboza Collection. Inspirándose en un estilo atemporal, elegante y con materiales de altísima calidad, su lanzamiento fue todo un éxito.
“Era un sueño que yo tenía que cumplir y lo hice. Le fue buenísimo a la colección. Eran modelos personalizados únicos y se vendieron todos los vestidos”, recuerda.
Ese éxito rotundo la transformó de blogger a empresaria: “Volvería a la moda, pero con otro modelo de venta”. Pero ahora su prioridad está en su nueva compañía: JessBeauty.

Say Jess to Beauty!
Desde sus comienzos como modelo, el cuidado de la piel ha sido fundamental para ella. Buscando entender las necesidades de su rostro, se apasionó por el mundo del skincare: “Empecé a estudiar qué eran los activos, qué efectos tenían en la piel y cómo mejorar ciertas condiciones”.
Todos sus descubrimientos nuevos los compartía en su Instagram con una sección que llamó “Hablemos de Skincare”. Mientras más aprendía, más quería involucrarse en este mundo: “No encontraba realmente algo que cumpliera con todos los parámetros que yo quería utilizar. Entre más conocimientos adquieres, más picky te vuelves. Me prometí hacer una línea de skincare sin sacrificar nada. Va a cumplir todos los estándares que yo no consigo y vamos a desarrollar algo único”, explica.
Tras más de dos años y medio de pruebas y de conceptualización de la marca, nació JessBeauty, su compañía de cuidado de la piel, que se adapta a todos: “Los productos se hicieron en Corea con fórmulas que fueron desarrolladas por nosotros y un equipo de químicos y dermatólogos expertos”.
El lanzamiento oficial lo hizo hace varias semanas y ha sido un éxito: “Teníamos previsto que mucha gente entrara a la página para curiosear, pero se realizaron tantas compras al mismo tiempo que colapsó el procesador de compras. A mí cuando me dijeron eso yo no sabía si preocuparme, porque no quería generar frustración en las personas, o alegrarme porque jamás en mi vida pensé que algo así podía pasar”.
Hizo un lanzamiento con cuatro productos estrella: “Una rutina de skincare no se vale de un solo componente. Si ibas a confiar en JessBeauty, quería que tuvieras de manera real y efectiva los resultados en tu piel”.
Sin embargo, también aclara: “Ojo, no vas a ver resultados inmediatos usando la línea de skincare, ni la mía, ni la de nadie. Hay algo que necesitas cuando haces una rutina de skincare: compromiso, constancia y paciencia”.



A. Face Reset Cleanser ($26): tiene escualeno (piel suave, tersa, alivia inflamación e hidrata) y también ingredientes derivados del coco (sensación calmante, purificante, sin fragancia).
¿Cómo se usa? Es un jabón facial, perfecto para eliminar impurezas.
Tip de Jess: “Te deja la cara limpia, pero suave. La formulación tiene ingredientes que te aportan humectación y los agentes detergentes de la formulación no te van a maltratar. Jamás la vas a sentir tensa ni acartonada, sino glowy”.



B. Shine Bright Serum ($48): tiene niacinamida (reduce manchas en la piel y es hidratante) y ácido tranexámico (refuerza la barrera protectora de la piel y previene las manchas).
¿Cómo se usa? Luego del lavado, aplícalo en la cara y el cuello, de día y de noche.
Tip de Jess: “Este sérum es espectacular. Es antiaging, trata las manchas y la primera aparición de las líneas de expresión. Ayuda a darle luminosidad a la piel. Úsalo por tres semanas y verás la diferencia”.



C. Post Workout Gel Mask ($44): tiene té verde (antiaging, antioxidante y calmante), niacinamida (reduce manchas, hidrata y mejora la textura) y centella asiática (regenera y cicatriza).
¿Cómo se usa? Puede ser para después de entrenar o como crema hidratante.
Tip de Jess: “Es excelente para una piel estresada, cansada e irritada. Aplicas esta mascarilla y sentirás el alivio inmediato; además, te da un glow espectacular”.



D. Twin Momma Belly Balm ($32): tiene aceite de girasol (antioxidante e hidratante), aceite de argán (alivia y relaja la piel), manteca de karité (nutre profundamente, alivia y cicatriza), aceite de coco (calmante y antiaging) y aceite de aguacate (emoliente y nutrivo).
¿Cómo se usa? Aplicar las veces que quieras sobre la barriga y el pecho.
Tip de Jess: “Quise mezclar los mejores aceites naturales, concentrarlos, que estén libres de fragancia y hacer un bálsamo que esté especialmente pensado para las mujeres embarazadas. Yo estaba en pleno post-parto cuando lo creé”.