Cindy Huzenman lleva más de diez años ayudando a personas a transformar sus espacios. Lo que comenzó como un hobby en Miami para apoyar a su familia, se fue consolidando como método eficaz y como filosofía rentable, que la llevó a fundar una empresa que hoy cuenta con un equipo especializado de organizadoras que atienden proyectos tanto a nivel nacional, en EEUU, como a nivel internacional.
“Siempre he sido muy organizada y poco a poco fui desarrollando un método propio que, gracias a las recomendaciones, me ha llevado a ser reconocida en la industria. He tenido la oportunidad de transformar la vida de personas y trabajar con personalidades de diferentes ámbitos. Hoy en día ya tengo un libro, llevo mi filosofía a través de conferencias y comparto lo que hago en programas de televisión”.
El método de Cindy
Ir un paso hacia adelante. Eso ha hecho Cindy con su filosofía, que es más que un orden específico. Se trata no sólo de tener un espacio bonito, organizado o limpio, es crear un sistema que funcione para cada persona y familia porque “cada hogar e individuo tiene diferentes necesidades y el enfoque no es único para todos, sino que es personalizado para cada caso”.
Lo primero, según nos explica, es entender rutinas y estilo de vida para luego diseñar sistemas de organización que sean fáciles de mantener a largo plazo: “la clave es simplificar sin perder de vista la funcionalidad”.
Fotografía Cortesía Cindyology
¿Cómo arrancar el proceso?
El primer paso es definir las áreas que te generan más caos o estrés en el día a día e identificar “ese punto de dolor”. Empezar por ahí el proceso para que todo resulte más motivador y satisfactorio.
Estos “puntos de dolor” son diferentes en cada hogar, porque para algunos puede ser la cocina, para otros el cuarto de juegos de los chamos o un clóset. Lo importante es que luego de identificarlo, debes despejarlo, eliminando lo que ya no usas o no sirve.
Si te resulta muy abrumador, inicia con algo pequeño pero significativo como una gaveta que te permita romper el hielo y ya verás que luego podrás seguir adelante para organizar espacios más grandes.
Ventajas y beneficios
Más allá de que los espacios se verán más armónicos y organizados, las ventajas son numerosas e incluyen claridad mental y aumento en la productividad. “Un espacio organizado ayuda a maximizar el tiempo, favorece un ambiente más armonioso en el hogar y a su vez reduce el estrés, promoviendo una sensación de paz y control”, enfatizó.
Importante también es incluir a toda la familia, asignando tareas pequeñas y alcanzables a cada miembro, según edad y habilidades. De esta manera, todos entienden que la organización no es una tarea única, sino que es un estilo de vida, y además los sistemas de organización pueden mantenerse en el tiempo.
Fotografía Cortesía Cindyology
Consejos
La experta nos recomienda:
1. Empezar poco a poco.
2. Enfocarse en un espacio a la vez.
3. Deshacerse de lo que ya no sirve.
4. Asegurarse de que cada objeto tenga un lugar asignado.
Luego de que ya hayas aplicado el método, trata de revisar y comprobar que te sigue funcionando el sistema y haz revisiones rápidas, diaria o semanalmente, para que el desorden no se acumule y vayas manteniendo espacios en armonía para ti y tu familia.
"El truco está en comenzar con pasos pequeños para evitar sentirnos abrumados y celebrar los pequeños avances”, Cindy Huzenman.